EJES – La capacidad de compra del trabajador petrolero cayó 24% desde 2011

Úselo y tírelo. Empleo petrolero en la Argentina no convencional

La política energética de Cambiemos generó una caída del empleo en el sector hidrocarburífero. El nuevo informe de EJES analiza las relaciones laborales en la industria hidrocarburífera y la volatilidad del mercado de trabajo petrolero.

En materia de empleo, el sector petrolero en la última década resultó ser, proporcionalmente, uno de los de mayor dinamismo, primero en materia de creación de puestos de trabajo, y luego en materia de destrucción de una gran cantidad de ellos.

La dinámica social y económica de las regiones petroleras es muy sensible y en extremo vulnerable a los acontecimientos de esta actividad. En primer lugar, los ingresos del Estado están fuertemente ligados a la evolución de la producción de gas y petróleo, por el peso de las regalías en los presupuestos provinciales. En segundo lugar, la llegada de grandes contingentes de trabajadores y trabajadoras en épocas de expansión de la actividad reorganiza ciudades y poblados completos. A eso se le suma, como se trata de asalariados y asalariadas de ingresos relativamente altos, que el efecto sobre diferentes actividades urbanas se ve amplificado. Por otra parte, la pérdida de estos empleos, en épocas de retraimiento de la actividad, tiene un efecto irreversible sobre la calidad de vida de los trabajadores y trabajadoras: nuevas casas han sido construidas, diferentes lazos de sociabilidad en el nuevo territorio desarrollados y han abandonado sus lugares de origen.

Para aportar al debate sobre el estado e implicancias del sector hidrocarburífero, Taller Ecologista (Rosario) y OPSur (Buenos Aires y Neuquén), en el marco de EJES – Enlace por la Justicia Energética y Socioambiental, presentan el informe Úselo y tírelo
Empleo petrolero en la Argentina no convencional”
.

  • En la actualidad, la capacidad de compra de un salario petrolero es un 24% más reducida que la que era en 2011, previo al desarrollo de Vaca Muerta
  • La reducción del salario real del 16% entre 2015 y 2017, cuadriplica la caída promedio del poder de compra de los salarios de los trabajadores argentinos, que en el mismo período vieron reducir su capacidad adquisitiva en 4 puntos porcentuales.
  • Entre 2016 y 2017 se perdieron 9.198 empleos en el sector petrolero, que equivalen al 14% de la fuerza laboral registrada en la actividad en el año 2015.
  • Las perforaciones de YPF en el país se redujeron de 1.012 pozos en 2015 (incluyendo exploración y desarrollo), a 730 pozos en 2016 y a 496 en 2017, y redujo su personal total de 22.025 trabajadores en 2015 a 19.072 en 2017.
  • Solamente considerando los trabajadores registrados en el sector privado, en 2016 y 2017 los hogares argentinos perdieron 156 mil millones de pesos de capacidad de consumo, por la caída del salario real y por la pérdida de puestos de trabajo. El sector petrolero, con el 1% de la fuerza laboral del país, explica el 23% de esa pérdida.
  • La masa salarial petrolera durante 2016 y 2017 acumuló una pérdida de casi 36 mil millones de pesos en relación a su nivel del año 2015.
  • Además de ir en aumento, las transferencias representaron una porción cada vez mayor de la facturación total del sector, alcanzando el 48% para 2015.

En el marco del retraimiento de las inversiones, las compañías del sector interesadas en la explotación no convencional presionaron para la firma de un acuerdo junto al gobierno y al sindicato que modificó varios elementos de las relaciones laborales de la actividad para el caso específico de la explotación no convencional: se dejaron de remunerar las horas “taxi” (tiempo de traslado hasta el pozo), se incorporó la modalidad de contrato de trabajo por plazo determinado, se amplió la realización de horas extras, se redujeron las dotaciones técnicas de personal, se amplían las restricciones de trabajo por situaciones de peligro como la noche o los vientos fuertes.

El comienzo de la caída del poder de compra de los trabajadores petroleros se da en 2012, cuando en el resto de los rubros la economía nacional incrementaban la capacidad adquisitiva de sus salarios. Este mismo año, comienza la explotación del yacimiento Vaca Muerta en nuestro país. Quizás haya que indagar en las prácticas laborales de la actividad para encontrar allí si la producción no convencional está necesariamente asociada a remuneraciones más bajas de la actividad y con mayor precarización

Las pérdidas de empleos por un lado y la caída del 16% del salario real por otro, ubican a los trabajadores petroleros en la larga lista de perdedores de la política energética implementada en los últimos dos años.